Desde el 2010 hasta la fecha han sido expulsados un total de 598 militares del ejército nacional por estar relacionados con pandillas, según el ministro de defensa, David Munguía Payés.

“Nosotros hemos ahondado en una serie de filtros para evitar que miembros de pandillas ingresen a la fuerza armada, para ello pedimos información a la Policía Nacional Civil (PNC) y a la Dirección de Centros Penales (DGCP)”, indicó Mungía Payés.

Las pandillas Mara Salvatrucha (MS), Barrio 18 y otras minoritarias poseen más de 600 células en El Salvador y solo en el 24,4 % de los 262 municipios mantienen una “poca presencia”, de acuerdo con datos de la Policía obtenidos por Acan-efe.

Las autoridades culpan a las pandillas por la situación de criminalidad y violencia que viven los salvadoreños, con tasas de 103 y 81,7 asesinatos por cada 100.000 habitantes en los años 2015 y 2016, respectivamente.

El titular de la Fuerza Armada (FAES) descartó la hipótesis de que el armamento que tienen en su poder las pandillas sean equipo del Ejército Nacional, quien hablo de los 15 fusiles desaparecidos desde hace un año.