Autoridades de la Policía Nacional Civil (PNC) informaron sobre la captura de varios cabecillas de la Mara Salvatrucha (MS-13) que se escondían en un culto religioso.

Unidades de las Fuerzas de Reacción de El Salvador (FES) realizaban un operativo para dar con varios cabecillas de la zona en el sector del Caserío El Saigón del Cantón El Salitre del municipio de Nejapa, San Salvador.

Todos los Lunes por la tarde, habitantes de la zona celebraron un culto cristiano en una galera provisional de esa comunidad. El día de ayer el culto habría terminado de forma rápida, ya que se avistaba una tormenta.

Un pandilleros que se encontraba en la zona se percato de la presencia de los elementos de la FES, dando aviso de inmediato a sus secuaces. Al verse rodeados por los elementos policiales, los terroristas decidieron esconder los ilícitos que estaban en su poder y bajo a amenazas obligaron a los feligreses que abandonaban el lugar a simular nuevamente la celebración eclesiástica.

Los uniformaron decidieron inspeccionar la galera en donde se volvió a llevar a cabo el culto observando a varios unos sujetos que entonaban alabanzas arrodillados, los cuales tenían las características de los pandilleros a los que buscaban.

Al realizar un cateo los delincuentes de opusieron de forma violenta, lo cual termino de delatar la farsa que habían planeado, dejando con resultado la captura de los peligrosos criminales.

Los aprendidos respondían al nombre de Jonathan David Palacios Deras, alias el “Deyvi” de 22 años de edad, José Danilo Monroy Orellana, alias el “Quemado” de 21 años y Melvin Geovany Silva Domínguez, alias “Baby”, de 19 años; Todos miembros activos de la MS-13.

Se presume que Jonathan David Palacios Deras es el cabecilla de esta agrupación terrorista.

De acuerdo a las investigaciones de la PNC, los detenidos lideran una estructura criminal, la cual ha sido participe de enfrentamientos con grupos élites y policiales.

En el operativo también se realizó la captura de dos familiares de los cabecillas identificados como Blanca Mirian 36 años de edad y José Danilo de 40, ambos de apellido Monroy Granados.

A los detenidos se les atribuye el asesinato de varios de varias personas, entre ellas, miembros de pandillas rivales.