El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó esta mañana a Puerto Rico para conocer de primera mano los estragos ocasionados por el huracán María, que arrasó la isla, y en plena polémica por sus críticas a la gestión que las autoridades locales han hecho de la crisis.

Trump aterrizó hacia las 11:45 hora local en la base aérea Luis Muñiz, de la Guardia Nacional y en su primera visita a la isla como primer ejecutivo estadounidense, llegó junto a su esposa y primera dama, Melania, la comisionada residente en Washington, Jenniffer González, y varios jefes de agencias y asesores. Lo acompañó también un grupo de periodistas.

Desde la puerta del avión, Trump saludó a la prensa en la base Muñiz, pero al bajar las escaleras, Trump y su esposa estrecharon manos con el gobernador Ricardo Rosselló y la primera dama, Beatriz.

El mandatario tiene previsto pasar unas cinco horas en la isla para ser informado de la marcha de las labores de reconstrucción de las infraestructuras y los servicios tras el paso hace dos semanas del huracán María, además de escuchar el testimonio de personas damnificadas por el ciclón, que dejó al menos 16 muertos en la isla.