La ruta de buses 249 que hace su recorrido entre Ahuachapán y Sonsonate, tiene prohibido el ingreso al caso urbano de Apaneca.

Dicha orden fue tomada por la alcaldía de la municipalidad, quien tomó la decisión de impedirles el ingreso argumentando que dañan las calles y no pagan impuestos.

Además, señalan que en una de las calles donde transitaba dicha unidad de transporte colectivo se encuentra un kinder y que los motoristas son poco prudentes y podrían ocasionar un percance vial.

Los buses hacían el recorrido de unas siete cuadras adentro de la ciudad y luego lo continuaban sobre la carretera principal.

Esta medida ha obligado a los usuarios de la ruta a caminar entre 100 y 200 metros para llegar a la carretera para esperar que pasen las unidades.

Según argumentos de usuarios de la ruta, mencionan que esta decisión los afecta dado a que por las noches deben de caminar en la oscuridad desde la carretera hasta el centro de Apaneca y la falta de alumbrado hace que estén más propensos a ser víctima de asaltantes.

El alcalde, Osmín Guzmán, expresó que han tenido que reparar las calles que son dañadas por las unidades de la ruta de buses 249 a pesar de que no pagan impuestos.

Ante esta medida, el jefe regional de occidente del VMT, Douglas Trujillo, expresó que sólo dicha entidad es competente para establecer recorridos.

La municipalidad mandó a colocar tierra, ramas y piedras, sobre el acceso a la ciudad para evitar la entrada de las unidades. Al parecer esta decisión se implemento desde el inicio de esta semana.