Varias familias de una colonia del municipio de Apopa, al sur de San Salvador, abandonaron este día sus hogares, debido a la amenazas de grupos criminales.

El éxodo de al menos cuatro familia ocurrió la tarde de este miércoles en la colonia Brisas de Joya Grande, en la jurisdicción de Apopa. En ese lugar al rededor de 22 personas huyeron luego de ser amenazados por terroristas de la pandilla 18.

Al lugar se hicieron presente elementos de la Policía Nacional Civil (PNC), no precisamente para brindar seguridad a dicha comunidad, sino para escoltar a las familias que sacaban los pocos objetos de valor con los que contaban.

Según una de las familias que han huido del lugar, la noche del martes se encontraban realizando un rezo en conmemoración a una familiar que fue asesinada un año atrás, cuando un grupo de pandilleros interrumpió y les anunciaron que atentaría contra sus vidas de no abandonar la zona lo más pronto posible.

Esta mañana, cuando la policía brindaba seguridad a las familias que sacaban sus pertenencias de las viviendas, lograron observar un grupo de pandilleros que se encontraban asediando la zona, por lo que montaron un dispositivo de búsqueda. Al percatarse de la presencia de las autoridades, los pandilleros huyeron con rumbo desconocidos.

Este día la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) volvió a recordar al gobierno que ha emitido una sentencia en donde obliga a dar protección a las víctimas de desplazamientos forzados por causa de amenazas de grupos criminales.

[Comunicado] Sala ordena adoptar medidas de protección a favor de más víctimas de desplazamiento forzado interno https://t.co/dSYyCcLBLD

— Sala de lo Cnal. (@SalaCnalSV) November 22, 2017