Dos de los tres jueces del Tribunal Regional Federal de la 4ª Región de la ciudad de Porto Alegre ratificaron la sentencia del juez Sergio Moro contra el ex mandatario por corrupción.

Este miércoles fue anunciado que Luiz Inácio Lula da Silva ha sido condenado en segunda instancia por corrupción pasiva y lavado de dinero. Según las autoridades, Lula recibió un apartamento en un balneario a cambio de favorecer a la constructora OAS en contratos con Petrobras. Por esta razón, la justicia brasileña decidió el miércoles confirmar la sentencia.

Hay prueba, encima de lo razonable, de que Lula fue uno de los articuladores, si no el principal, de la trama de corrupción, aseguran.

Tras ser debatida su condena, el juez Joao Gebran, pidió elevar la condena de nueve años y medio a 12 años y un mes de prisión.

Esta tarde el tribunal confirmó -por unanimidad- la culpabilidad de Lula da Silva y aumenta la pena a 12 años de cárcel. Desde ya se puede afirmar que con esta segunda condena el líder del Partido de los Trabajadores (PT) tendrá muy difícil su participación en las elecciones de 2018 a pesar de ser el candidato favorito de los brasileños.

Este juicio ha sido considerado por diversos analistas como “histórico” porque no solo pone en jaque a una de las figuras más importantes de la política brasileña, sino por su relevancia a la hora de influir en las elecciones de octubre de 2018.