La primera cumbre entre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, inició este día en el Palacio Presidencial de Helsinki, capital de Finlandia.

La cita se produjo con unos 50 minutos de retraso debido a la llegada tarde del mandatario ruso. Ambos presidentes, acompañados de traductores, se estrecharon la mano ante las cámaras.

Durante la reunión, el presidente Donald Trump dijo que “llevarse bien con Rusia es algo bueno, no algo malo”.

“El mundo quiere que nos llevemos bien, somos dos poderes nucleares, tenemos el 90% de las armas nucleares, no es algo bueno y tenemos que hacer algo sobre ello”, agregó Trump.

El encuentro se celebra apenas unos días después de que el fiscal especial Robert Mueller imputara a 12 espías rusos por hackear y difundir información de los correos electrónicos de altos cargos del Partido Demócrata en un intento aparente de beneficiar a Trump durante las elecciones de noviembre de 2016.

Además la reunión sucede en un tenso clima al interior de la parte estadounidense, ya que esta mañana Trump señaló en su cuenta de Twitter que las relaciones con Rusia nunca han estado peor gracias a muchos años de locura y estupidez en Estados Unidos.

Trump ha asegurado que tiene “pocas expectativas” sobre la cumbre y que solo desea conocer mejor a Putin, mientras que el Kremlin ha destacado que lo más importante es abrir vías de diálogo para poder mejorar la deteriorada relación bilateral.

Se espera que los dos mandatarios hablen sobre Siria, donde Estados Unidos quiere limitar la presencia militar iraní, y confía en que Rusia ejerza influencia sobre Teherán en ese sentido.

Trump aterrizó en el aeropuerto de la capital finlandesa hacia las 21:00 horas (hora local) procedente del Reino Unido, la penúltima parada de una gira europea que ha estado llena de gestos tensos hacia los aliados tradicionales de Washington.

El mandatario, acompañado de su esposa Melania, se dirigió inmediatamente a su hotel.