El Tribunal 2° de Sentencia de Santa Ana sentenció a dos décadas de cárcel a Julio César Ramírez, de 38 años de edad, por el delito de violación en menor e incapaz continua, en perjuicio de un niño de 11 años.

Según consta el expediente de la Fiscalía General de la República (FGR), los hechos ocurrieron entre los meses de junio a de septiembre de 2017, en el municipio de Metapán, departamento de Santa Ana.

El caso inicio luego que el padre de la víctima interpusiera una denuncia manifestando que el 15 de septiembre del año pasado, regresó de su trabajo más temprano de lo habitual y al llegar a la casa solo encontró a sus dos hijas.

Al preguntar a sus dos hijas dónde estaba su hermano, ellas le responden que se fue en su bicicleta y que quizá se fue con un sujeto llamado Julio, que vende panes a la salida de escuela donde el menor asistía.

El padre del niño llega a la casa del sujeto a buscarlo y tras pitar varias veces con su mototaxi y gritarle, el imputado salió y le dijo que el menor estaba adentro guardando unas herramientas porque había estado arreglando la bicicleta.

Luego que el menor saliera, su padre le noto muy triste y preocupado. Al regresar a la casa, el padre se le acerco a su hijo y le dijo que platicaran, que si le pasaba algo que no tuviera miedo que le contara y que él lo va a proteger siempre.

El menor comenzó a llorar, contándole a su padre que Julio lo ha amenazado para que no contara nada porque si no le haría daño a toda la familia. El niño confesó que el imputado lo llevaba a su casa para quitarle la ropa y abusar sexualmente de él.

Además el niño manifiesta que Julio le ofreció dinero, a lo que el padre le pregunta al niño si ese día era la primera vez que ocurría el hecho, respondiendo el pequeño que había sido abusado desde el mes de junio.

Tras ser denunciado y luego capturado el sujeto fue llevado a juicio donde el juez segundo de sentencia lo encontró culpable y le condenó a 20 años de prisión.