Tras no lograr pasar a octavos en la copa mundial de Rusia, los jugadores de Corea del Sur solo tenían un último cartucho que quemar para evitar prestar un servicio militar de dos años.

Este día la selección surcoreana llegaba a la final de los Juegos Asiáticos con la responsabilidad de derrotar a su similar de Japón y así evitar ser enlistados en el ejército como una política establecida en dicho país.

En un encuentro sumamente difícil y emocionante el combinado surcoreano se impuso a Japón por 2-1 en tiempo extra, gracias a los tantos de Lee Seung-Woo y de Hwang Hee-Chan.

Al finalizar el encuentro las lágrimas de Son Heung-Min hizo contraste con aquella escena donde se le ve llorar tras ser eliminados en la fase de grupos del mundial, pese a haber derrotado a la entonces campeona del mundo, Alemania.

Con este resultado Son volverá a unirse a las filas del Tottenham ingles, equipo donde forma parte como uno de los jugadores claves.

Antes de disputar la final del torneo realizado en Indonesia, el equipo surcoreano tuvo que superar a Irán 2-0, Uzbekistán 4-3 y Vietnam 3-1.