
Una niña, de 8 años de edad, esperó tres días para que sus padres decidieran llevarla al Hospital de Zacatecoluca por las quemaduras de segundo grado que tenía en el rostro y hombro.
De acuerdo a la información preliminar, la menor resultó quemada el 31 de diciembre, sin embargo, sus padres por temor a ser juzgados por las autoridades no la llevaron de inmediato.
Consecuencia de esto, la niña contrajo una grave infección en las quemaduras por pólvora que tiene en su rostro y hombro.
Durante el periodo vacacional de Navidad y Fin de Año del 2018, 24 niños resultaron quemados al manipular pólvora, algunas de ellas prohibidas. Dos de los niños fueron amputados de sus miembros debido a la gravedad de las quemaduras.
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