Al menos 13 personas murieron congeladas en la región siberiana de Buriatia, en la parte asiática oriental de la Federación Rusa.

Las muertes se registraron durante las fiestas navideñas, cuando el ambiente estaba a temperatura de hasta 49 grados centigrados bajo cero, según informaron hoy las autoridades locales.

La mayoría de los fallecidos son hombres de mediana y avanzada edad, aunque también hay tres mujeres y una menor de 17 años de edad.

Según las autoridades la mayoría de las víctimas fueron halladas con “una concentración considerable de alcohol” que, según las autoridades, “de una forma u otra” los llevó a su muerte por hipotermia.

La menor de las víctimas, es una estudiante rusa, quien perdió la vida en su pueblo natal de Kurkuman, donde había llegado de la capital de Buriatia, Ulan-Udé, con motivo de las fiestas de Año Nuevo.

Según la versión oficial, la joven murió durante la celebración de las fiestas en un bar, donde se encontraba en compañía en unos amigos

Durante la velada, la muchacha decidió salir del local para ir a los baños que estaba afuera del lugar, pero “nunca volvió”.