El alcalde del municipio de Soyapango, Juan Pablo Álvarez, aseguró este lunes estar preocupado un olor “a muerte” que se respira en algunas colonias del municipio cercanas a la Unidad de Salud del ISSS, debido al tiempo que pasan los cuerpos en la morgue.

Álvarez asegura que el olor que ahora emana desde dicho centro médico es el principal foco de infección ya que los cadáveres –por diversas causas de muerte, incluidas por COVID 19– pasan varios días en el lugar.

El edil asegura que en el municipio han muerto un total de 163 personas por COVID-19 y ya se han registrado días que unas 40 familias han llegado a solicitar partidas de defunción a la alcaldía.

El personal médico de dicha unidad médica a exigido por diferentes redes sociales una cuarentena obligatoria a nivel nacional para detener el avance del COVID-19, ya que aseguran en el municipio están tratando a personas con el virus sin tener los equipos de protección necesarios.