Autoridades de pequeños pueblos de Indonesia ha comenzado a obligar a quienes no usan mascarilla a excavar tumbas para las víctimas del COVID-19.

A pesar que el uso de la mascarilla es obligatoria en el país, muchos se rehusan a usar un cubre bocas, por lo que como medida para crear consciencia sobre el riesgo de sus actos, los obligar a cavar tumbas para quienes han fallecido por complicaciones a causa del virus.

Fue el Gobierno de ese país quien delegó a las autoridades locales a que decidieran qué castigos aplicar a quienes desobedecían las medidas de bioseguridad.

Las multas por incumplimiento del uso del tapabocas oscilan alrededor de los 10 dólares, pero aquellos que no puedan o quieran pagarlos, deberán cumplir un castigo social, que consiste en cavar tumbas y otros trabajos dentro de los cementerios locales, donde entierran las víctimas del COVID-19.