Autoridades de Portugal confirmaron este martes que el confinamiento se alargará por al menos un mes, debido al aumento de casos de COVID-19 y que lleva por objetivo evitar una tercera ola de contagios.

El primer ministro portugués, António Costa, aseguró que la “única forma” de frenar los contagios es un nuevo confinamiento similar al que se aplicó durante la primera ola.

Sin embargo, la reglas concretas del confinamiento serán anunciados mañana miércoles, después de la reunión del consejo de ministros, aunque en los últimos días ya se ha avanzado que implicará el cierre de gran parte del comercio y los servicios y de la restauración, que sólo podrá operar para llevar o en servicio a domicilio.

El Gobierno había asegurado además que, a diferencia de la primera ola, esta vez las escuelas se mantendrían abiertas.

En la última semana se ha superado la barrera de los 10.000 contagios diarios en varias jornadas, así como el centenar de muertos, con picos de hasta 155 fallecidos en la jornada de este martes.

Las medidas específicas para ordenar el confinamiento serán aprobadas por el consejo de ministros, luego que la prórroga de la emergencia sea aprobada.